Clasicazo de los 80 y del gran Jonh Landis, con los comienzos de Eddie Murphy Dan Aykroid y Jamie Lee Curtis. Cuenta la historia de un pordiosero que pasa a ser un hombre adinerado y un adinerado que pasa a ser un pordiosero, todo por una ridícula apuesta de dos hermanos millonarios (que son dos mendigos en el Principe de Zamunda). A pesar de que el argumento es previsible, el sabor de los 80 impregna toda la cita, las tetas de Jamie Lee también, y el toque Murphy por supuesto. La película tiene moraleja aunque tampoco es para partirse el eje.
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